lunes, 6 de septiembre de 2010

Esteros de niebla




Comienza el día
Y es como una molestia.
Amo tanto la noche,
La luna,
Los sucesos
De la oscuridad.
Me disfrazo en las sombras,
Cambio con las nubes.
En cambio,
Al amanecer,
Vuelvo a ser yo
Con mis limitaciones
Como ahora,
Que escribo torpe
Sobre esta vida
Que lo peor
y más maravilloso que tiene
es el riesgo,
el no saber
que pasará después,
donde terminará,
qué conocerás,
qué sentirás,
cuánto más durarás.
Y por eso
Veo, en esta ruta,
El rojo, naranja,
Amarillo, verde,
Celeste, azul
Cielo
Y la estrella,
Que era el barrilete
De esa lucecita
En esa casa
En medio del llano
solitario,
Ha desaparecido,
Y la niebla
Es un gran estero
Que deja ver los postes
a noventa grados,
Sosteniendo sus cables
Que imitan al horizonte
Y vuelvo
A recordarla.
¿Por cuánto tiempo
Deberá pasarme esto?
¿Por cuántos viajes más
Estará ella en mi mente
molestándome?
Las vacas nadan
En el estero de niebla
Y nosotros también
Nos sumergimos
Y reducimos el paso
En una caminera.

4 comentarios:

Aye dijo...

la niebla, no saber qué hay más allá, sí, se le parece bastante a esta vida.

me encantó!

(y el diseño nuevo del blog también está bueno, volvió a la vida y con todo! :P)

Marcos A. Rodriguez Alemany dijo...

Que viaje! loco. Gusti estas en lo mejor, re conectado con la sensación, que bárbaro como se hila el viaje, la niebla, la luz de esa estrella que ya no se ve pero sigue quemando

gustavito show dijo...

gracias chicos! es muy copado lo q interpretaron! je
no m había dado cuenta del todo de la relación de la niebla con la vida, era más un poema escrito en el trajín de un viaje largo con la espontaneidad del momento! q bueno! un abrazo!

cabro dijo...

gustav,,,,(te mando comas porque los puntos me rompen las pelotas)
anduve dando vueltas por aca hoy y recorde todo el torbellino.
afilado andas en esto de juntar letras
ya no sos vos casi, sos tus palabras.